Orden y limpieza
Aunque para algunos un coche es un simple medio de transporte para desplazarse de un punto a otro, lo cierto es que es mucho más que eso.
A continuación te damos una serie de pequeños consejos para que el orden y la limpieza sea una constante en nuestro vehículo.
1.Bien colocado
Lo primero es buscar el correcto lugar para la ubicación de cada cosa, teniendo en cuenta el uso que se va a dar a cada una de estas, esto dependerá de las veces que se va usar.
Al igual que con un bolso, para ordenar el interior del vehículo es vaciarlo. Tirar esa bolsa de patatas vacía, los envoltorios y los miles de papeles de se acumulan en los viajes. No olvides los pequeños compartimentos, ésos que muchas veces olvidamos que existen y que son los que más basura acumulan.
Una vez vacío, piensa en los elementos imprescindibles que debes llevar y busca un lugar para ellos. Los chalecos reflectantes, por ejemplo, en las puertas delanteras; o los pequeños objetos, como monedas o caramelos, en botes para que no anden desperdigados. Si tienes niños, puedes poner sus juguetes en organizadores colgando de los asientos delanteros. Estarán ordenados, y llegarán fácilmente a ellos. Para la comida y cualquier resto que se pueda generar, es imprescindible contar con una papelera con una base pesada, para evitar su vuelco, que podemos colocar en el suelo de la parte trasera.
2. Esas odiosas manchas
La tapicería es la parte más delicada del interior de los vehículos, y la que con el paso del tiempo acaba más deteriorada. La manera de limpiarla varía según los materiales. Si se trata de tela, lo mejor es pasar un cepillo de cerdas fuertes para desprender las partículas de suciedad antes de utilizar el aspirador. Para manchas resistentes, puedes utilizar jabón para lavar prendas a mano. Si lo diluyes en bastante agua no necesitarás pasar un trapo húmedo después y, además, conseguirás un agradable olor a limpio.
Para las tapicerías de cuero, utiliza un producto especial para nutrirla e hidratarla. Los mismos productos utilizados para la piel se pueden usar para los plásticos del salpicadero y el interior de las puertas.
3. Los pelos
Si tienes perro o gato y sueles viajar con él en el coche ya sabrás que uno de los elementos más difíciles de eliminar son sus pelos.
Dependiendo de su longitud y tipo –los pelos cortos y duros son más difíciles–, tendrás que emplear distintas técnicas. Si cuentas con un aspirador potente, lo mejor es empezar con un repaso general aplicando complementos que incorporan cepillos y que estrechan el diámetro del tubo, concentrando su potencia.
Como seguramente eso no sea suficiente, sobre todo para la tapicería y las alfombrillas, en el mercado hay rodillos con varias capas de papel adhesivo que se van quitando según se llenan de pelo y pelusa. Una solución más casera, y barata, pero igualmente efectiva, es enrollarse la mano con cinta de embalar e ir pasándola por todos los rincones para eliminar hasta el último pelo.
5. También el maletero
El maletero suele ser en muchos casos el gran olvidado del orden y la limpieza del vehículo. Sin embargo, es fundamental mantenerlo a raya para poder optimizar su espacio. En invierno, saca la sombrilla y la esterilla; en verano, las cadenas y la rasqueta de hielo. En general, todos esos objetos de ‘temporada’ que acaban en él todo el año, convirtiendo este espacio en un trastero improvisado.
Recoloca aquello que sí debes llevar, como herramientas, triángulo, botiquín o una botella de aceite, a los lados. Una buena idea es coser tiras de velcro para sujetarlos y evitar que se mezclen con el equipaje. Puedes aprovechar para revisar la caja de herramientas y la presión de la rueda de repuesto.